lunes, 16 de noviembre de 2015

Esa Extraña Tendencia De Las Madres Por Comparar

Para mí, como ya sabéis todo este mundo de la maternidad es nuevo, muy nuevo y todo me parece un descubrimiento, así es como descubrí que las madres siempre queremos que nuestros hijos sean los mejores, algo muy normal, pero hay que saber de qué hablamos.


Recuerdo perfectamente que cuando nació Garbancita nacieron varios niños de amigas y conocidas por las mismas fechas. Yo como estaba tan agobiada porque no comía, no dormía,  y necesitaba soluciones preguntaba a todo el mundo... pero esos niños eran malvas, comían fenomenal, dormían aún mejor, se enganchaban perfectamente a la teta, las vacunas no les daban reacción, no tenían un resfriado, ni regurgitaban, no hacían ruidos cuando dormían, les encantaba ir en el coche, les encantaba el chupete.... madre mía me sentía la peor madre del mundo, me preguntaba una y otra vez "¿ qué es lo que yo he hecho mal para que me esté pasando todo esto?" Para mí todo era un problema, cada día era un reto que superar, pensaba que era algo normal en madres primerizas, pero saber que existían esos niños perfectos y que a mí no me había tocado me hacía sentirme muy desafortunada.



Recuerdo cuando fui la primera vez a un pediatra en Galicia, llegamos desesperados en busca de soluciones y yo le expliqué que no entendía como los niños que habían nacido a su misma vez eran todos tan buenos y tan perfectos y la mía tenía todo para hacerme estar de los nervios, no entraba en mi cabeza. El pediatra me dijo primero que eso era el Karma, y que si el padre o yo habíamos dado mala vida a nuestros padres la vida nos lo estaba devolviendo con nuestra Garbancita, y no nos quedaba más remedio que aguantar por haber sido "malos" hijos.



Y en segundo lugar me explicó que por algún extraño motivo las madres mienten, siempre, exageran todo, si tu hijo duerme toda la noche de un tirón, la de la otra madre duerme seguro que mejor. Si tu hijo toma con tres meses 150ml de biberón el de otra madre con tres meses toma 210ml y así todo... Algo que nunca he entendido ni entenderé, ¿qué necesidad hay de mentir en las rutinas de un niño? ¿acaso les hace mejores madres o ellos son mejores hijos?, no lo entiendo.



Un niño es un niño y no puede tener un máster en medicina con sólo 9 meses. Yo como preguntaba todo me encontré con niños que al año y medio ya no llevaban pañal, que con cuatro meses gateaban, que a los 7 meses ya se ponían de pie, que con 15 días dormían 7 horas seguidas, que no hicieron ni una grieta en los pezones de su madre, que se dormían solos tranquilamente en su cuna, que no necesitaban el amor de sus padres.... vamos en una frase, fenómenos de la naturaleza.

No sé si entendéis de qué hablo, pero os aseguro que yo me he sentido la madre más frustrada del mundo.